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Ivormentico – La aspiradora sin cable que muy pocos conocen

Ficha técnica

  • Potencia: 40 Kpa
  • Autonomía: 40 minutos
  • Luz del cabezal:
  • Sistema de filtrado: HEPA
  • Recambios:
  • Tecnología ciclónica:
  • Aspirador de mano:
  • Tubo flexible: No
  • Tubo telescópico:
  • Pantalla: No
  • Función de fregado: No
  • Base de pared:

Teníamos un problema muy concreto. Entre el pelo del gato, las pelusas traicioneras del pasillo y esa manía que tiene el polvo de aparecer donde menos lo esperas, necesitábamos una aspiradora escoba sin cable que no se quedara sin fuerza a mitad del pasillo ni nos dejara con la espalda hecha trizas. Nos topamos con la Ivormentico, y lo primero que pensamos fue: ¿por menos de 100 euros? ¿Será un trasto más que acabará cogiendo polvo en el trastero?

Spoiler: no fue así. Pero tampoco es el milagro que algunos comentarios prometen. La probamos a fondo, día sí y día también, y lo que te vamos a contar aquí es lo que de verdad se siente al convivir con esta aspiradora. Con sus virtudes, sus rarezas y sus limitaciones. Sin filtros ni florituras.

Prepárate, porque te vamos a contar lo bueno, lo no tan bueno y lo que nadie dice, pero deberías saber antes de hacer clic en “comprar”.

¿Qué encontrarás en esta review?

Una potencia de succión que no se anda con tonterías

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Lo primero que hicimos fue lo típico: pasarla por una alfombra de pelo corto que, sinceramente, estaba pidiendo auxilio. Al encenderla, lo primero que notamos fue ese rugido de motor que te dice “aquí hay potencia de verdad”. Y vaya si la hay: los 40 KPA no son humo, succiona con fuerza y se nota en cada pasada.

Tanto en suelos duros como en alfombras, la sensación es que la suciedad desaparece casi sin esfuerzo, como si alguien hubiera activado un imán invisible. La parte que nos dejó más locos fue el rendimiento en rincones: bordes de zócalos, pequeñas ranuras del suelo… la boquilla llegó a todo y se llevó lo que encontró por el camino sin titubeos.

Eso sí, cuando activas el modo de máxima potencia, la batería empieza a caer como si estuvieras viendo una serie en streaming con los datos del móvil. No es algo dramático, pero hay que saber dosificar si quieres cubrir toda la casa sin paradas técnicas.


Sistema de filtrado que cumple, sin dramas

¿Aire más limpio? Puede. ¿Menos polvo flotando tras pasar la aspiradora? Definitivamente. El filtro HEPA que incorpora hace bien su trabajo, y aunque no es una aspiradora pensada para personas con alergias severas, sí hemos notado que al aspirar zonas más polvorientas no queda esa sensación de aire recargado o polvoriento después.

Además, los filtros son lavables y vienen dos de repuesto en la caja, lo cual se agradece muchísimo. Porque, seamos sinceros, no siempre nos acordamos de limpiarlos a tiempo… y cuando lo hacemos, o están hechos un asco o ya no hay recambio. Aquí no pasa eso.

Eso sí, el filtro tarda bastante en secarse del todo después de lavarlo, así que hay que ser previsores si no quieres quedarte sin aspirar un par de días.


Su cabezal que ilumina (literalmente) los puntos ciegos

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Uno de esos detalles que no esperábamos y que nos terminó enganchando fue el cabezal con LED verde. No es solo postureo visual. Es tremendamente útil, sobre todo al limpiar debajo del sofá o de la cama. Esas pelusas rebeldes que se camuflan con la sombra ya no tienen dónde esconderse.

Además, el cepillo principal tiene un diseño bastante bien pensado. Las cerdas en forma de V hacen que la suciedad se canalice hacia el centro, y el sistema antienredos funciona mejor de lo que imaginábamos. Con un gato en casa, los pelos largos son el pan de cada día, y este cabezal ha evitado que tengamos que sacar las tijeras cada dos por tres.

Aunque, ojo, si el pelo está enredado desde hace días o son cantidades industriales, algún tirón sí que hay que pegarle de vez en cuando al rodillo. No es magia, pero se defiende.


Autonomía decente… si no te vienes arriba con el turbo

El nombre ya lo dice: Ivormentico 50Mins. Pero ya sabes cómo va esto… los 40 minutos son en modo eco, sin apurar y sin demasiada resistencia. Nosotros, usándola en un modo más intermedio y subiendo la potencia cuando hacía falta, hemos llegado sin problema a los 30-35 minutos reales, lo cual está bastante bien.

Para un piso de tamaño medio (unos 80-100 m²), da perfectamente para una limpieza completa sin tener que parar a recargar. Eso sí, si tienes un dúplex o eres de los que limpian a fondo con el turbo todo el rato, quizá se te quede corta.

La carga, por cierto, no es de las más rápidas del mercado, pero tampoco desespera. En unas cuatro horas está lista de nuevo para salir a dar guerra.


Ligera, cómoda y sorprendentemente versátil

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Aquí viene uno de los puntos que más nos sorprendió. La Ivormentico es más ligera de lo que esperábamos por el aspecto que tiene. A primera vista parece más aparatosa, pero una vez en la mano, es muy manejable y se lleva con facilidad incluso por escaleras o en el coche.

El mango es cómodo y el paso de aspiradora escoba a modo manual es cuestión de segundos. Cambiar de accesorio no da pereza, porque el sistema de anclaje funciona sin complicaciones, y eso hace que realmente acabes usándolos. Nosotros lo usamos para aspirar el sofá, el coche y hasta una estantería donde se acumulaba el polvo entre libros. Funciona.

La boquilla para hendiduras es bastante precisa y la combinación de cepillo + succión directa se adapta bien a distintas superficies. Lo que más nos gustó es que no tienes que hacer malabares para aspirar entre los barrotes de una silla o detrás de una cortina.


Otros detalles que no esperábamos y nos hicieron sonreír

A veces son las pequeñas cosas. Como por ejemplo: el tubo metálico tiene un acabado azul mate bastante elegante, nada plasticoso. No es una aspiradora que escondas en el armario con vergüenza.

También el hecho de que el LED del cabezal se active automáticamente al detectar zonas oscuras nos pareció un puntazo. Y aunque parezca una tontería, el nivel de ruido es bastante contenido, sobre todo en el modo medio. Puedes aspirar a última hora sin que parezca que estás arrancando un avión en el pasillo.


Cosas que no nos convencieron (porque no todo iba a ser perfecto)

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Aquí va la parte que no sale en los folletos. El depósito de suciedad es pequeño. Muy pequeño. Si tienes mascota o limpias zonas con mucha pelusa, prepárate para vaciarlo cada dos por tres. No es dramático, pero sí algo incómodo cuando vas con prisa.

El soporte para colgarla en la pared es bastante básico. Cumple su función, pero no esperes un sistema elegante ni fácil de instalar. Más bien es ese tipo de accesorio que usas si no te importa que quede un poco chapucero.

Y por último, aunque el botón de encendido es cómodo, hubiéramos preferido que tuviera un gatillo como el de otras aspiradoras escoba, que solo se activa mientras lo mantienes pulsado. Aquí hay que encenderla y apagarla, lo cual parece una tontería, pero se nota cuando quieres hacer pasadas rápidas o te olvidas de apagarla mientras cambias de zona.


Conclusión – Una aspiradora desconocida, pero muy solvente

¿Te ha pasado alguna vez que pruebas algo sin esperar mucho y acabas diciendo «oye, pues no está nada mal»? Esa fue un poco nuestra sensación con la Ivormentico. No es la aspiradora escoba más completa ni la más silenciosa ni la que tiene más autonomía, pero para su rango de precio y lo que ofrece, nos ha parecido sorprendentemente capaz.

Y lo mejor: no se siente como un trasto barato. Tiene personalidad. Tiene potencia. Y sobre todo, tiene detalles que nos facilitaron la vida más de lo que esperábamos.

Aunque, pensándolo bien… igual el depósito sí que nos fastidió más de lo que creíamos.